Ayacucho es uno de los destinos favoritos de los peruanos durante las festividades por Semana Santa. La conocida como ‘La ciudad de las 33 iglesias’ ofrece diferentes actividades religiosas para que los católicos puedan expresar su fe y devoción, acompañando a Jesús en su peregrinación, muerte y resurrección.
Sin embargo, la otra cara de la moneda es protagonizada por jóvenes que aprovechan el feriado y visitan esta ciudad, pero no por su religiosidad sino por la tradicional Pascua Toro, que se realiza el Sábado de Gloria y este año se llevó a cabo en el distrito de el Carmen Alto. Esta celebración, que se inició en la época republicana, y representaba un acto de redención, en los últimos años se ha convertido en una fiesta donde reina la alegría de los más jóvenes, pero que lamentablemente se ve empañada por los excesos.
Si bien un numeroso grupo de jóvenes disfrutó de las celebraciones sin causar desmanes y quejas por parte de los moradores de la zona, otro grupo continuó con la fiesta en la vía pública, libando licor hasta altas horas de la madrugada quedándose dormidos en las veredas, tal como se difundió a través de videos en las redes sociales.
Otro hecho que ha sido duramente cuestionado por los usuarios es que durante el desarrollo del Pascua Toro, algunos jóvenes fueron cargados en hombros para despojarse de sus prendas en medio de la algarabía y el alcohol. Estos fueron grabados en video y difundidos en TikTok donde han sido criticados y considerados como una falta de respeto al sentido de Semana Santa.
Sin embargo, este no es el primer año en el que se observan este tipo de situaciones cuestionadas por los ayacuchanos. Antes, el Pascua Toro se realizaba en la Plaza de Armas de Huamanga, pero fue suspendida debido a la cantidad de basura y personas que se quedaban dormidas en el suelo, atentando contra el ornato público y dificultando el desarrollo de las actividades tradicionales programadas para el Domingo de Resurrección.
En ese sentido, la Municipalidad Distrital de Huamanga prohibió cualquier tipo de celebración por el Sábado de Gloria en el centro de la ciudad para evitar que se repitan desmanes en la Plaza Mayor.
La Semana Santa de Ayacucho ha sido declarado como Patrimonio Cultural de la Nación por constituir un evento de fe e identidad cultural, “reuniendo dentro de un mismo espacio festivo, ritual y performativo a una religiosidad de carácter litúrgico católico con una de carácter popular”.
El Pascua Toro, en su versión contemporánea, fue excluido de esta resolución debido a que, según el documento, “la aglomeración masiva de personas en la plaza de armas asociada al consumo de bebidas alcohólicas, y la imitación de acciones festivas de otros países, se pueden convertir en un factor que cuestione su condición como bien inmaterial del Patrimonio Cultural de la Nación”.
