Entre junio y julio del 2021, cuando Pedro Castillo encabezaba la candidatura a la Presidencia de la República junto a Dina Boluarte, que aspiraba a la Vicepresidencia bajo la fórmula de Perú Libre, funcionó un comedor popular destinado a simpatizantes del partido que por entonces acampaban en los exteriores del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) y la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) a la espera de los resultados electorales.
Se llamó ‘Ranchito Dina Boluarte’ y se estableció en el sótano de Jirón Callao 460, donde se preparaba desayuno, almuerzo y cena para los partidarios que viajaron a Lima desde distintas regiones durante la segunda vuelta. Según un informe contable interno del comedor, el empresario Henry Shimabukuro, investigado por el caso ‘Gabinete en la sombra’, fue uno de los aportantes.
El exasesor de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI) contribuyó con balones de gas, verduras, hortalizas, platos, cubiertos descartables y hasta servilletas. Videos publicados por el portal Epicentro TV evidencian una actividad dentro del lugar, con Boluarte sentada en la mesa de honor. En otro clip, la actual mandataria aparece bailando con Víctor Torres, mencionado por Shimabukuro como uno de sus allegados.
Los aportes del empresario se registraron el 28 de junio, el 30 de junio y el 5 de julio de 2021. La encargada de administrar el ‘Ranchito Dina Boluarte’ fue la excandidata al Congreso, Dinela Canta, quien desde enero de este año es prefecta del distrito de Puente Piedra. Anteriormente, nunca había trabajado para el Estado, pero desde que Boluarte llegó al poder ha sumado S/ 33 mil en órdenes de servicios, según un informe de Cuarto Poder.
Un documento de más de 60 páginas elaborado por Canta y difundido por Latina el miércoles señala que el comedor nació “para generar más presencia de la candidata en eventos y marchas” y “era una forma de demostrar que Boluarte agradecía el apoyo de las delegaciones”. Precisa, además, que llegó a preparar más de mil porciones.
La coordinadora evitó responder al noticiero. En la víspera, el Ministerio Público informó que amplió una investigación contra Boluarte y Castillo por el presunto financiamiento prohibido de organizaciones políticas, lavado de activos y organización criminal a raíz de supuestos aportes ilegales en la campaña electoral de hace dos años.
La presidenta ha señalado que la investigación por presunto financiamiento irregular de la campaña electoral de 2021 hará que los implicados en este caso “respondan con la verdad, entreguen las pruebas y señalen quiénes y cómo recibieron supuestos aportes”.
El caso es seguido por la Primera Fiscalía Supraprovincial Especializada en Delitos de Lavado de Activos contra Boluarte, Castillo y Shimabukuro, que ha declarado ante la prensa haber financiado los viajes y actividades proselitistas de la hoy presidenta durante la campaña.
Boluarte ha remarcado su rechazo a las acusaciones y reiteró que estas son una “oscura maniobra política que pretende manchar al Gobierno constitucional, a la democracia y la institucionalidad”.
“No ha existido ningún tipo de negociación, pedidos o favores. Si el señor Shimabukuro ha colaborado o financiado actividades partidarias, lo ha hecho absolutamente de manera personal y sin transar compromiso alguno”, señaló su despacho a través de Twitter.