El sonado caso de presunta estafa piramidal y las denuncias en contra de Omega Pro volvieron a tomar fuerza con la reciente detención del empresario peruano Juan Carlos Reynoso -el pasado 15 de marzo- en unas oficinas de la financiera Black Wall Street Capital, en Ciudad de México. Su figura se tornó controversial, pues se desempeñó como gerente para Latinoamerica de la primera compañía en mención.
No hay cifra exacta de personas presumiblemente afectadas por el “cuento” de esta empresa que operaba bajo el lema de “Alcanza de libertad financiera”, pero se calcula – de acuerdo a Bloomberg- que solo en Colombia serían al menos 280. La cifra de pérdida para los inversionistas ascendería a casi 300 millones de pesos colombianos.
Se sabe que Omega Pro, cuyo líder para este continente era Juan Carlos Reynoso, también habría tenido presencia en Chile, España y México. Esto hace pensar a las autoridades que la cifra de probables perjudicados sería mucho mayor a lo estimado. Según la propia página de la compañía, sus afiliados bordean los dos millones, lo que da luces de un universo enorme de potenciales víctimas.
En sus redes sociales, el empresario peruano invitaba a sus miles de seguidores a ser parte de este mundo.
“Hola, amigos quiero hablarles de los activos digitales y quiénes son las personas que pueden tomar ventaja de estos nuevos mercados financieros: básicamente las personas que manejan dinero, de todas las edades… el mundo del dinero digital te da muchas opciones que son muy simples y fáciles de poder manejar con la ayuda de un teléfono celular inteligente”, señalaba Reynoso en un clip de octubre de 2021, meses antes del destape del caso Omega Pro.
Según El Economista, las detenciones de Reynoso y otras cuatro personas en las instalaciones de Black Wall Street Capital tienen detrás una historia que involucraría al narcotráfico, el trading de criptomonedas e “incluso hasta una entidad regulada y supervisada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV)”.
De acuerdo con esta última entidad, la financiera Black Wall Street Capital cuenta con registro bajo la figura de Asesor de Inversión, misma que está regulada y supervisada por esta autoridad.
En los registros de esta, la financiera está autorizada para brindar dos tipos de servicios:
-Proporcionar de manera habitual y profesional servicios de administración de cartera de valores, tomando decisiones de inversión a nombre y por cuenta de terceros.
-Otorgar de manera habitual y profesional asesoría de inversión en valores, análisis y emisión de recomendaciones de inversión de manera individualizada.
Siguiendo con información de la comisión, “los asesores en inversiones son personas físicas y morales que sin ser intermediarios del mercado de valores, proporcionan de manera habitual y profesional servicios de administración de cartera de valores”.
Al tratarse de entidad regulada y supervisada por dicha comisión, Black Wall Street Capital “debe de tener políticas de prevención de lavado de dinero”. La vigilancia de estas firmas recae en la vicepresidencia de Supervisión Bursátil de dicha autoridad.
Juan Carlos Minero Alonso, quien también cayó detenido el día del operativo, es el apoderado legal de la financiera, que cuenta con registro desde noviembre de 2016.
Minero Alonso y Guillermo Arturo Delgado Olguín registraron -en 2015- la marca de Black WallStreet Capital ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI).
En el registro consultado en el IMPI, los productos o servicios de esta firma serían “los seguros, operaciones financieras, operaciones monetarias y los negocios inmobiliarios”.
Para las investigaciones fiscales, Black Wall Street Capital, dedicada el rubro de gestión y asesoría financiera en el mercado de valores internacionales, tendría vínculos y negocios con un brazo armado del peligroso Cártel Jalisco Nueva Generación, liderada por Nemesio Oseguera Cervantes, mejor conocido en el mundo del narcotráfico como ‘El Mencho’.
En sus redes sociales, Reynoso compartía principalmente contenido sobre su materia: economía, finanzas e inversión, así como consejos para mejorar el liderazgo de una persona o potenciar su talento.
Pero también mostraba su gusto especial por costosos vehículos de alta gama, de las marcas más top del mercado, y no ocultaba su afición por las carreras automovilísticas.