La semana pasada salió a la luz un escándalo que relaciona el nombre del hijo del presidente Gustavo Petro, Nicolás Petro Burgos, con presuntamente haber recibido dineros cercanos al narcotráfico. De acuerdo con la información que dio a conocer la exesposa del también diputado del Atlántico, Day Vásquez, el primogénito del mandatario habría recibido más de 600 millones de pesos por parte de Samuel Santander Lopesierra, alias el Hombre Marlboro, quien estuvo condenado en Estados Unidos por narcotráfico y 400 millones de pesos para la misma contienda electoral de Alfonso Del Cristo Hilsaca, conocido como El Turco Hilsaca, y quien también ha sido relacionado con crímenes relacionados con narcotráfico.
Inicialmente, según el testimonio de la barranquillera a la revista Semana, el dinero iba para la campaña del actual mandatario, pero Petro Burgos, nunca ingreso ese dinero y lo gastó en algunas propiedades y gastos personales. Además, Day Vásquez, mencionó que le habría advertido de estas acusaciones al presidente a comienzos de febrero, pero que este no hizo nada.
Tras las acusaciones y los escándalos que han estallado, el presidente Gustavo Petro, decidió dar una entrevista a la revista Cambio, en el espacio periodístico habló de varios temas. Entre ellos, y uno de los más polémicos, la situación que está afrontando por las acusaciones en contra de su primogénito y de la cual ha señalado que dejará en manos de las autoridades competentes: “Es a la Fiscalía a la que le corresponde y tiene todas las garantías de que no va a haber ninguna presión ni nada por el estilo desde el Gobierno en relación a este tipo de procesos”, ratificó en su diálogo con el medio colombiano.
En el espacio comenzó relatando como ha sido su relación con Nicolás, pues al ser el primer hijo del presidente e hijo del primer matrimonio, que se desarrolló mientras aún estaba en las filas del M-19, su relación fue diferente que con sus otros hijos; incluso, comentó que él no fue un papá presente para Petro Burgos.
“Yo alcancé a estar un año con Katia y con Nicolás en Bucaramanga en la clandestinidad. Me conseguí un colchón y me conseguí un corral, precisamente un corralito de esos de niño, para que pudiera estar en el colchón. Dormíamos en el piso. (…) Hasta que vi en un artículo de Vanguardia, que es el periódico más conocido en el nororiente, una operación que hizo el Ejército de ese entonces contra una pareja del ELN y mataron el bebé. Y entonces, por esa y otras razones, yo me separé de mi hijo y de Katia. Empecé a caminar en soledad los caminos de la clandestinidad. Hasta que vino la desmovilización del M-19 en el 90. En ese año, él todavía era un niño. Pero yo ya había hecho una vida sentimental aparte. Y no nos volvimos a encontrar realmente. Él se crio en Córdoba. Estudió allá. Hizo su universidad. Realmente nunca tuvimos la oportunidad de convivir. No lo crie, esa es la realidad”, contó.
Y agregó que cuando se dio el espacio para crear su lazo, se dio cuando su hijo ya estaba inquietante por ser parte de la política y comenzar a hacer su carrera. Que él hablaba con la mamá de Nicolás y que le hablaba de las inquietudes normales de una madre, pero que nunca vio nada raro. Que luego fue cuando vino toda la separación de su hijo de Day y prefirió no meterse en los asuntos personales de ellos, pese a que ambos le comentaron de la situación y que cuando habló con la exesposa de su hijo, ella le comentó algunas cosas, él habló con Nicolás, quien le negó todo y que si hizo advertencia a su gabinete de no entablar reuniones con Petro Burgos para evitar cualquier escándalo.
“Cuando veo que hay una ruptura, le digo a ambos que no me voy a meter. Y lo que hice fue tomar las medidas de prevención, porque yo no sé si esas informaciones son ciertas o no, y no podría calificarlas, ni siquiera como presidente. Institucionalmente, es a la Fiscalía a la que le corresponde y tiene todas las garantías de que no va a haber ninguna presión ni nada por el estilo desde el Gobierno en relación a este tipo de procesos. Es ella la que tiene que decidir, no yo. Y en esa medida, el mismo día que hablé con Day y que me alertó, en una reunión del consejo de ministros, tomé la decisión de advertirles a todos los ministros y ministras que estaban ahí que no hubiera ningún tipo de relacionamiento con mi hijo y otra persona que ya no recuerdo el nombre. Pero por prevención, no porque tuviera certeza”, señaló el mandatario de la Nación.
Y rectificó que, en su trabajo como padre, en cuanto a los hijos con los que si tuvo la oportunidad de ver crecer y compartir su crianza, siempre les ha ratificado la importancia de no involucrarse en negocios que no están sustentados en procesos legales: “Todos desde pequeños, los hijos que yo crie siempre han tenido la certeza de la rectitud en relación a lo público”, puntualizó el presidente de la República.