La impunidad del Cártel de Sinaloa en los bastiones de su dominio se exhibe a cualquier hora sin que autoridades intervengan para dar con sicarios adscritos a la organización criminal que desfilan fuertemente armados, quienes solo presumen su poderío con seguridad.
De acuerdo con reportes extraoficiales, miembros de alguna facción de este grupo armado se pasearon por calles de Culiacán durante la noche del reciente 17 de octubre, una fecha que marcó a la ciudad por el caos de narcoterrorismo generado en 2019 en el operativo fallido contra Ovidio Guzmán López.
En una camioneat tipo pick up viajaban al menos seis sujetos con fusiles de grueso calibre, equipo táctico y gritando que patrullan por la zona como subordinados al mando heredado por Joaquín Guzmán Loera, el Chapo, quien fuera máximo jefe del Cártel de Sinaloa y paga una cadena perpetua por narcotráfico en Estados Unidos.
Aparententemente se alcanaza a escuchar que transitan sin mayores consecuencias por la Prolongación Álvaro Obregón, según referencias de uno de los tres supuestos delincuentes que viajan en la parte trasera del vehículo que se desplaza a toda velocidad por una vialidad principal.
“Por la Obregón casi no nos vale v*rg*, pa’ que vean nomás viejón, pura gente del Chapo a la v*rg*”, son parte de los gritos de guerra, orgullosos del dominio que ejercen sin mayores consecuencias.
Apenas este lunes reciente se cumplieron tres años del llamado jueves negro, cuando los hijos del Chapo Guzmán lograron que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ordenara dejar libre al Ratón, luego de que los Chapitos causaran un caos en la capital de Sinaloa con enfrentamientos, asesinatos y una suma de acciones narcoterroristas.
“Otro culiacanazo, otro culiacanazo”, gritaba entre rechiflas el sujeto que tomaba el video y mostraba a sus compañeros fuertemente armados, cual si fuera heroico lo que hicieron en el jueves negro.
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