El fenómeno de El Niño y el inusual ciclón Yaku que se han producido a inicios de este año en las costas de Perú y Ecuador han llamado la atención a científicos y meteorólogos internacionales que según creen que dichos eventos climatológicos estarán seguidos por un fenómeno completo, y que le han denominado el ‘Niño Poderoso’.
Es así que los investigadores de la Oficina de Meteorología de Australia, a través de estudios, ha considerado que ahora se está formando un fenómeno de El Niño mucho más fuerte y que tendrá importantes consecuencias para el mundo que provocará temperaturas extremas en los océanos, la pérdida de bosques tropicales, el blanqueamiento de corales, la generación de incendios forestales, el deshielo polar, entre otros.
Sin embargo, varios científicos que fueron contactados por el medio de comunicación londinense BBC News se mostraron herméticos y reacios a hablar con mayor detalle sobre las implicaciones de este inexplicable fenómeno global, pero uno de ellos dijo estar “extremadamente preocupado y completamente estresado”.
De acuerdo al equipo de científicos, este mes, la superficie del mar alcanzó un nuevo récord de temperatura, pero lo que más llamó la atención es que nunca se había calentado tanto ni tan rápido. Hasta el momento no entienden muy bien por qué de este evento; pero la preocupación asociada a otros fenómenos meteorológicos, prevén que la temperatura mundial pueda alcanzar un nivel sumamente inquietante a finales del próximo año.
Pero el problema es que el aumento de las temperaturas de los océanos podría hacer desaparecer la vida marina, causaría fenómenos meteorológicos más extremos y se elevaría el nivel del mar. Asimismo, este fenómeno climático hace que los océanos sean menos eficaces a la hora de absorber los gases de efecto invernadero que calientan el planeta, según refiere el artículo de BBC News.
Un nuevo e importante estudio, elaborado por Karina Von Schuckmann, científica y oceanógrafa del grupo de investigación Mercator Ocean International, resaltó un hecho preocupante, en los últimos 15 años, el calor acumulado en la Tierra ha aumentado en un 50%, y la mayor parte de ese aumento ha ido a parar a los océanos.
Esto está teniendo consecuencias reales a nivel mundial: no solo la temperatura global de los océanos alcanzó un nuevo récord en abril de este año, sino que en algunas regiones la diferencia con respecto a otros momentos del pasado fue enorme. Como ejemplo se mencionaron las temperaturas de la superficie del mar frente a la costa este de Norteamérica, que en marzo superaron en 13.8°C la media registrada entre 1981-2011.
“Hemos duplicado el calor en el sistema climático en los últimos 15 años. No quiero decir que esto sea cambio climático, variabilidad natural o una mezcla de ambos. Aún no lo sabemos. Pero sí vemos este cambio”, declaró Von Schuckmann a BBC News.
Años atrás, este fenómeno natural ha estado en una fase más fría denominada La Niña, y ha ayudado a mantener bajo control las temperaturas globales, pero los investigadores creen ahora que se está formando un el ‘Niño poderoso’ que tendrá importantes consecuencias para el mundo.
Según Josef Ludescher, del Instituto de Investigación Climática de Potsdam, el impacto en la temperatura suele calmarse unos meses después de alcanzar su máximo nivel cuando se produce El Niño, por eso 2024 será probablemente el más cálido registrado.
“Y puede que sí, que nos acerquemos a los días de 1,5°C”, comentó el investigador. Cabe precisar que el aumento de temperatura que los científicos establecieron como el máximo nivel permitido para poder frenar el calentamiento global es de 1,5°C, pero podría pasar dicha cifra temporalmente ante la amenaza de dicho fenómeno.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico de Estados Unidos (NWS, por sus siglas en inglés), hay un 62% de probabilidades de que este fenómeno se desarrolle entre mayo y julio de este año. También estimaron en 40% las probabilidades de que sea un El ‘Niño fuerte’.
En ese sentido, Ángel Adames Corraliza, profesor de Ciencias Atmosféricas de la Universidad de Wisconsin, dijo a BBC Mundo, que abril es un momento muy difícil para anticipar la aparición de este fenómeno, pero señaló que hay varias señales que hacen pensar que sí ocurrirá.
En primer lugar, apunta a las altas temperaturas que se han registrado fuera de la costa de Perú, lo cual ha provocado intensas lluvias, inundaciones, deslizamientos y pérdidas de vidas y de recursos materiales.
