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Aumenta la presencia de vendedores ambulantes argentinos en el centro de Santiago de Chile

Ambulantes argentinos en Chile
Cajas de té en sacos, uno de los productos comercializados por los argentinos en Chile en el comercio informal.

El barrio Meiggs es un tradicional barrio comercial mayorista de Santiago donde se encuentra de todo, a buenos precios, y que se caracteriza por la gran cantidad de gente que lo visita. También hay muchísimo comercio ambulante, bastante oferta de productos piratas, y hace un par de meses fue intervenido por el gobierno por los problemas de inseguridad.

A ese lugar -una suerte de barrio chino- comenzaron a llegar en estos días diversos comerciantes argentinos para vender sus productos utilizando el peso chileno y aprovechando su mayor valor. Todo, mientras decenas de chilenos cruzan la frontera para adquirir mercadería a mitad de precio en ciudades como Mendoza o Río Gallegos.

Una nota de un programa de la TV chilena dio cuenta del hecho y grabó a varias vendedoras argentinas que ofrecía productos como té, aceite y salsas de tomate. “Les compré a ellos buenas cosas”, dijo una de las clientas, que adquirió dos cajas de té de 100 saquitos La Morenita por 2 mil pesos chilenos, unos 559 pesos argentinos, 2.4 en dólares. “Si traen precios más baratos, de todas maneras es conveniente. En Chile está muy caro todo”, señaló la clienta al espacio matinal del canal Chilevisión.

“El bolsillo, como está la inflación, no alcanza para comprar en el supermercado, entonces uno tiene que ver alternativas”, agregó otra entrevistada. “Como está la inflación, muy alta, no alcanza para comprar en un supermercado. Entonces, uno tiene que ver alternativas”, señaló otra compradora chilena.

En todo caso, los vendedores ambulante argentinos se instalaron en la calles centrales del Barrio Meiggs con maletas y muchísimos bolsos para trasladar su mercadería, con el riesgo asociado que la policía chilena les pueda requisar sus bienes por trabajar sin los respectivos permisos. Al momento de vociferar sus productos, además, los argentinos aseguran estar vendiendo los mismos que están adquiriendo los viajeros chilenos de TikTok, aunque esta vez sin la necesidad de trasladarse de país.

“Uno tiene que buscar la mejor forma de sobrevivir y, si se puede hacer así, como antes se hacía cuando la gente venía de Perú, Tacna, con mercadería. Ahora si se dan las posibilidades de Argentina (…) Cada quien puede ver su forma”, manifestó otro chileno, asiduo visitante del sector.

Sin embargo, el programa también mostró algunas voces de rechazo a la presencia de más vendedores informales en el sector. “A veces lo barato cuesta caro. Justamente es por eso que la invasión de productos que evaden las arcas fiscales a la larga traen perjuicio a la nación”, señaló un hombre.

El barrio Meiggs fue intervenido el año pasado. En el lugar prolifera el comercio informal.
El barrio Meiggs fue intervenido el año pasado. En el lugar prolifera el comercio informal. (PABLO SANHUEZA/)

En tanto, los espacios de televisión locales continúan exhibiendo diversos reportajes al boom de compras de los chilenos en Argentina aprovechando la devaluación del peso.

“Una masiva presencia de chilenos se ha visto en Mendoza, Argentina, todo debido al conveniente cambio de divisas para nuestros compatriotas. De hecho, muchos nacionales arriendan casas de lujo, en vez de pagar hoteles, y compran mercaderías para cuando regresen a sus hogares”, indicó el sitio Meganoticias.

Sin embargo, un reconocido analista internacional abordó el tema en Canal 13 y señaló que esta situación “es insostenible”.

“Es insostenible en el tiempo una política de expansión monetaria como la que tiene Argentina, de subsidios a productos como los que tiene, sino hace unas medidas de shock para contener esta debacle”, agregó Libardo Buitrago, experto de origen colombiano, quien estableció que el 10 de diciembre de 2023, tras las elecciones presidenciales en Argentina, quien llegue al poder “tendrá que tomar una decisión política” y darle fin a esta situación.

“Argentina, económicamente, se está arrimando todos los días a un precipicio”, sentenció.

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